martes, 22 de abril de 2014

Hoteles y campings cumplen las expectativas y rozan el 100% de ocupación en Benidorm

Objetivo cumplido. Tal y como se preveía, tanto el sector hotelero como el del camping en Benidorm han conseguido hacer un pleno durante esta Semana Santa en lo que a ocupación se refiere. El 100% era el porcentaje que se atrevía a vaticinar el presidente de la Asociación Empresarial de Hoteles de Benidorm y la Costa Blanca (Hosbec), Toni Mayor, sobre las plazas de hotel vendidas durante los días fuertes de Pascua. «Quizá se ha quedado alguna libre, pero serían casos rarísimos. Hemos rozado prácticamente el lleno. Ha sido una Semana Santa de sobresaliente, que no recordaba desde hace 6 ó 7 años», apunta el presidente de la patronal hotelera.
En lo que se refiere a hoteles, la progresión ha ido en consonancia al año pasado, ya que, en estas mismas fechas, se alcanzaron picos del 90% en el Sábado Santo. La sorpresa ha sido, sobre todo, para los negocios de camping, que en 2013, en Pascua, no llegaron ni al 60% de ocupación y este año han estado prácticamente a rebosar de tiendas de campaña. Francisco Delgado, presidente de los negocios de campings en esta localidad, señalaba ayer que la meteorología, durante toda la semana pasada, ha acompañado para que la gente se anime a practicar este tipo de turismo. Otros años, según dice, siempre han tenido que lidiar con viento o lluvias, «pero esta vez han hecho días prácticamente de verano». Desde su punto de vista, «la cosa ha ido inmejorable en cuanto a ocupación, como para ponerle un diez a San Pedro, que ha velado por nosotros, aunque como siempre no nos podemos olvidar de la coletilla de la rentabilidad que sigue por los suelos», matiza Delgado.
Mayor y Delgado coinciden en que Benidorm sigue arrastrando un descenso de casi un 30% en lo que se refiere al nivel de rentabilidad de sus negocios de alojamiento. Según el presidente de Hosbec, cada año van ganando dos o tres puntos, «pero todavía nos quedan cuatro o cinco años para colocarnos en unos niveles de rentabilidad sostenible». Mayor explica que estos datos positivos de ocupación, que se vienen repitiendo en los últimos años, producen beneficios, «pero siguen sin ser lo suficientemente grandes como para invertir en nuevos negocios hoteleros y se quedan muy justos para la reactualización de los hoteles. Hay que tener en cuenta que la tecnología se va quedando trasnochada de año en año y hay que ir aplicando cambios cada dos por tres», admite.
Delgado está de acuerdo y se atreve a reivindicar, a medio plazo, una revisión de los precios de los negocios de alojamiento benidormenses. «Mantenemos las tarifas de 2006 y en esta ciudad contamos con buenos niveles de calidad, por lo que no se entiende que tengamos de los precios más bajos de España», dice.
En lo que se refiere a apartamentos turísticos, el presidente de Hosbec señala que las cifras han podido rondar más del 85% de ocupación. «Después están los que han alquilado particulares y lo que se ha ido comercializando a través de webs como Airbnb, que te llegan a ofrecer una habitación o una cueva. Eso parece que tampoco ha ido mal», advierte Mayor.
El doble de caja
Uno de los indicativos para Toni Mayor de que la gente también ha acudido a los apartamentos, tanto turísticos como de segunda residencia, es que los restaurantes estaban repletos. El presidente de la Asociación de Bares, Restaurantes y Cafeterías de Benidorm (Abreca), Javier del Castillo, resaltaba ayer que han contado con casi el doble de clientes con respecto al año pasado. «Hemos notado más alegría que otros años. Antes la gente pedía un menú para compartir y ahora cada uno se pide el suyo, y se animan incluso con botellas de vino bueno o alguna que otra exquisitez. Además, se ha aguantado a la clientela hasta más tarde. Otras veces a las doce o a la una no quedaba nadie por la calle, y este año resistían las terrazas hasta las dos de la madrugada. Supongo que el tiempo también ha acompañado», afirmaba Javier del Castillo.
Desde el restaurante El Barranco, uno de los más afamados de la localidad, confirmaban esta «alegría» de los turistas en cuanto a su gasto en hostelería. En este local, por ejemplo, han registrado un 30% más de comensales que el año pasado.
Menos tajada han sacado los comerciantes de Benidorm de esta avalancha de turistas. El presidente de la Asociación Independiente de Comerciantes (AICO), Rafa Gasent, subrayaba ayer a este diario que sólo en el centro se ha notado un pequeño repunte con respecto a pascuas anteriores. «En la zona de La Cala y en el Rincón el turista que venía tenía un poder adquisitivo bajo, por lo que tampoco se ha experimentado mucho incremento de ventas. No obstante, estamos contentos, ya que vemos que en los dos últimos años la cosa avanza y cada vez hay más movimiento».

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